Tweetear |
¿REALMENTE SIRVE LA COPA MENSTRUAL?
Al igual que tú, quería saber si realmente sirve la copa menstrual. TODAS, y digo prácticamente TODAS las páginas que hablan sobre la copa la alaban y dicen que es el invento más maravilloso del mundo: que si no se siente, no se mueve, no permite las fugas, que si la puedes traer todo el santo día, que es ecológica y respeta el medio ambiente, que si adiós a las compresas, tampones y shock tóxico, y un larguísimo etcétera.
Y como seguramente muchas, después de leer todas esas maravillas me lancé lo antes posible a comparar una, en mi caso una de marca Angelcup.
Así que, como muchas, abonaré a los más de 550 mil resultados de búsqueda de Google y les contaré mi experiencia, pero antes unos breves antecedentes sobre por qué me decidí a probar la copa menstrual:
¿POR QUÉ PROBAR CON LA COPA MENSTRUAL?
En mi caso por varias razones:
- Porque tengo un flujo realmente abundantes durante el primer y segundo día, tanto que en tres horas una compresa se me empapa hasta los bordes manchando mi ropa. Un tampón súper absorbente no me dura ni dos horas e inevitablemente siempre termino ensuciando mis bragas y a veces hasta los pantalones.
- Porque durante las noches tengo que permanecer boca arriba tiesa como una tabla y ay de mi si me muevo un centímetro porque si no corro el riesgo de manchar la cama y el pijama.
- Porque para evitar manchar la cama y el pijama, de todas formas debo pararme a mitad de la madrugada para cambiarme y correr al baño al despertar por las mañanas.
- Porque si uso sólo tampones, al segundo día de mi regla ya tengo una horrible inflamación en mi vagina y un dolor insoportable.
- Porque si tengo la mala ocurrencia de seguir usando tampones al tercer día, cuando mi flujo es escasísimo, mi vagina queda tan reseca que sacarlos DUELE.
- Porque soy olvidadiza por naturaleza y varias veces me ha pasado que llega mi período y tengo que correr a la farmacia (o al súper, o al Oxxo) con medio papel de baño en medio porque me agarró sin compresas ni tampones en casa.
- Porque cuando uso compresas se genera una cantidad insensata de basura.
- Porque cuando uso compresas la sangre se acumula en mis vellitos, y aun cuando me ducho en las mañanas por la tarde tengo el vello hecho una plasta.
Por esto y muchas cosas más me dije: "Hum, copa menstrual ¿por qué no?".
Ahora sí, esto es lo que aconteció:
VENTAJAS DE USAR LA COPA MENSTRUAL
1. Efectivamente, una vez puesta no se siente.
Yo he leído muchos testimonios de chicas que cuentan que sí la sienten, y en varios casos que les oprime la vejiga. Yo coincido en dos cosas: No se debe sentir, y se siente es porque está mal puesta o porque la forma de tu vagina no se adapta al artilugio de manera que bien este método simplemente podría no ser para ti. Algunas también dicen que les duele, y mucho, y aún así la siguen usando. Yo lo que les digo es: Si duele NO ES NORMAL, si te duele simplemente no deberías de usarla.
2. No provoca inflamación.
A diferencia de los tampones, que absorben no sólo la menstruación sino todo fluido dentro de la vagina, la copa no absorbe nada, de manera que no reseca y no duele al sacarla. Tampoco sentí esa horrible inflamación y dolor que suelo tener con el uso de los tampones.
3. Quita el dolor menstrual.
Este fue un efecto secundario inesperado, derivado curiosamente de una sus desventajas (hablaremos de ella más adelante). Yo suelo tener horribles dolores el primer día, con la copa simplemente no me dio nada esta vez.
Ya algunas chicas lo habían comentado, pero la gran mayoría (yo incluida) las tildaba de exageradas o bien de tan fanáticas y religiosas de la copa que se sugestionaban solas. Pues bien, resulta que no era su loca imaginación, sí quitan el dolor por así decirlo. Sucede que al tener que quitar la copa, la gran mayoría de las mujeres tiene ciertas dificultades, para lo cual hay que recurrir a los ejercicios de Kegel, lo cual implica ejercitar los músculos pélvicos. Aparentemente estos ejercicios ayudan mucho para regular los cólicos menstruales.
4. No hay que cambiarse por la noche y puedes moverte libremente.
A diferencia de cuando uso tampones y compresas, con la copa no tuve una sola fuga durante la noche, pude dormir tranquila y sin tener que preocuparme por moverme mientras dormía. Simplemente una maravilla, fue lo que más me gustó.
5. Duran más tiempo que los tampones.
Al menos en micaso, que durante el segundo día tengo que cambiar un tampón cada dos horas, con la copa pude hacerlo alrededor de la cuarta o quinta hora. Nada mal, aunque no es precisamente lo que esperaba con tantos comentarios por ahí diciendo que sólo se cambian un par de veces al día, en sus casas, y sin tener que pisar el lavabo del trabajo o restaurante, que afortunadas, las envidio.
Y ahora sí, la parte fea, la cruel realidad alejada de todos los comentarios maravillosos que circulan indiscriminadamente por la red:
DESVENTAJAS DE USAR LA COPA MENSTRUAL
1. Es difícil de extraer.
Y cuando digo difícil me refiero a DIFÍCIL. Como a muchas, la novatada que le dicen, el primer día casi corro a urgencias a que me la saquen, entré en pánico y tuve que buscar en veinte mil páginas para saber que hacer en esos casos. Y es que la copa se subió un poco más arriba de lo aconsejado, y aunque podía tocar la punta no alcanzaba a jalarla de la base. Por cierto, si estás en esa situación, aquí el truco: respira profundo, ponte de rodillas sobre una toalla y sientáte de tal manera que tus nalgas toquen los talones, tus piernas deben estar lo más abiertas posible, inclina tu cabeza y espalda ligeramente hacia atrás, esta posición acorta el canal vaginal y será más fácil sacar el aparato, pujar un poco ayuda bastante.
He leído comentarios de algunas mujeres diciendo que pasar por esto es humillante, y que simplemente una tendría que estar loca para exponerse a esto. Cosa de cada quien, a muchas no les pasa, a otras sólo les pasa la primera vez. El resto termina desistiendo por este y otros motivos.
2. Sí tiene fugas.
Esto fue realmente decepcionante, no es que haya manchado mucho, pero al menos el segundo día sí me pasó un par de veces, nada que no se pudiera controlar con un pantiprotector (salvaslip), pero ¿no se supone que precisamente compramos el artilugio entre otras cosas para no generar más basura y ahorrarnos dinero dejando de comprar productos desechables?
Dicen que si hay fugas puede ser porque está mal colocada o bien porque las paredes vaginales son demasiado flexibles, o porque la talla no es la correcta. Lo cual me lleva al siguiente punto.
3. Todas tenemos un cuerpo y una vagina diferentes.
Sí, aunque en los dibujitos de la primaria nuestro aparato reproductor parece una simple tubería vertical, la realidad es que ni es vertical y además la entrada tiene veinte mil formas diferentes. Esto trae como consecuencia que debas adivinar la talla que te toca (se sugiere grande para mujeres mayores de 30 años pero no siempre funciona), el doblez para introducirla (hay montones y no todos te acomodan), el ángulo para meterla, y después de todo eso siempre habrá un porcentaje de mujeres que nunca jamás se acomodará con la copa sin importar cuanto lo intentes.
4. La mayor parte de las mujeres no conocemos nuestro cuerpo.
No conocer tu cuerpo ni tus genitales es una desventaja, porque para introducir bien la copa debes tener ubicado tu cérvix ¿a quién rayos le importaba la ubicación de su cérvix antes de comprar esta cosa? y encontrarlo sólo se puede hacer una manera: metiendo tu dedo.
Hay mujeres que tiene cierta aversión a tocarse, mucho menos meterse sus deditos por la vagina, esto es producto de nuestra cultura, y aunque nos choque o creamos qué es retrógrado, hay que respetar esta postura, no todas pueden ser tan liberales como una.
5. Síndrome de shock tóxico.
Sí, aunque la mayor parte de las chicas recurre a la copa menstrual huyendo del síndrome de shock tóxico que causan los tampones, y que supuestamente nunca se ha registrado un caso asociado a la copita, lamento decirles que sí es una posibilidad.
¿Por qué el miedo al síndrome de shock tóxico? Durante los 80's Procter and Gamble sacó por primera y única vez en su vida, una marca de tampones súper absorbentes hechos de carboximetilcelulosa, que gelatinizaba los líquidos y permitía que estuvieras sin cambiarte durante casi todo el día. Una maravilla, hasta que llegó la epidemia. La empresa siempre alegó que sus productos no contenían el mentado estafilococo aureus que causa la toxina, pero igual tuvo que retirar su producto y de ahí en adelante todos los tampones tienen una advertencia sobre el síndrome y sus síntomas.
Lo cierto es que efectivamente, los tampones no contienen el estafilococo, lo tenemos nosotras y se encuentra en toda la piel, particularmente en la nariz y los genitales. El tampón se contamina al manipularlo con nuestras manos aun cuando nos las lavemos antes de acomodarlo, y eso mismo pasa con todo artefacto que introduces en la vagina.
A diferencia de los tampones súper absorbentes de los 80's (que ya no se comercializan, puesto que ahora todos son de rayón y así han bajado los casos), la copa menstrual no absorbe nada, no es caldo de cultivo para el estafilococo y además está hecha de silicona quirúrgica lo cual ayuda a que el bicho no se reproduzca y haga fiesta.
Aún así, se han reportado casos del síndrome en personas que utilizan objetos con similares características, como el diafragma. Lo cual tiene que ver con la cantidad de horas que pasa el aparato dentro de la vagina, por eso se recomienda nunca usarlo más de 12 horas (incluso menos), y en el caso de haber sufrido la enfermedad simplemente utilizar otra opción para tu período.
Síntomas: Dolor persistente de cabeza que no se quita con medicamento (el síndrome causa meningitis, por eso es el dolor), fiebre alta y repentina, dolor muscular similar al de la gripe, diarrea y vómitos, entre otros. Es muy fácil de confundir, por lo que si estás con tu período y tienes estos síntomas deberás comentarlo a tu médico, ya que es mortal en un 50% de los casos.`
Por cierto, en mi caso me llevé un susto de muerte. Al cuarto día de usar la copa (mi período dura prácticamente una semana), comencé a tener dolor de cabeza y muscular, no se me quitó en dos días y al tercero presenté diarrea. "Afortunadamente" se debió a consumir alimentos contaminados y se me quitó con antibiótico de amplio espectro, pero fue estresante.
6. Otros problemas de salud.
Otro tema, con el diafragma se han reportado aumento de infecciones urinarias, ya que la cosita oprime la vejiga y no se vacía del todo cuando vas al baño. Tomando en cuenta los casos de mujeres que sienten esto mismo, es muy posible que también la copa pueda ocasionar problemas similares. Si de por sí sufres con el tema infección urinaria recurrente, yo te recomendaría usar otro método.
También leí del caso de una chica que comenzó a sufrir bajones de presión sanguínea con el uso de la copa menstrual. Resulta que el vacío que hace la copita le estaba apretando una vena, como ya dijimos todas tenemos un cuerpo diferente y a esta mujer le tocó esa suerte.
En la mayoría de los casos la copa no produce mayor problema, pero siempre hay sus excepciones.
Por último, quiero desmentir aquí algunos mitos sobre la copa menstrual. Esto va a desencantar a todas las publicitarias que hay por ahí, pero ni modo, hay que aceptar la realidad de que no todos los métodos son para todas las mujeres y que nada es perfecto.
MITOS SOBRE LA COPA MENSTRUAL
Mito #1: Las grandes empresas no la comercializan porque ganan millones con los tampones y compresas y perderían su dinero vendiendo copas que duran 10 años.
Realidad: Si bien es cierto que los productos desechables de higiene femenina tienen ganancias millonarias, la verdad es que la copa no se comercializa porque las mismas mujeres no la compran. No es producto que puedan utilizar todas, no le acomoda al 100% de las mujeres y muchas de ellas no soportan la idea de manosearse para ponerla y quitarla.
Mito #2: Al ser un producto ecológico que ayuda al medio ambiente y estar libre de tóxicos, es completamente inocuo.
Realidad: Ya vimos que aunque raros, la copa menstrual, como cualquier otro producto externo a nuestro cuerpo, sí puede causar ciertos padecimientos. Por esa razón hay que seguir al pie de la letra las instrucciones de uso, y reportar al médico en caso de molestias.
Mis conclusiones:
¿VOLVERÍA A USAR LA COPA MENSTRUAL?
Sí pero alternando con compresas.
¿RECOMENDARÍA SU USO?
Sí pero no a menores de edad. Si una a los 35 se lleva el susto de la vida al tratar de quitarla por primera vez, ahora imagínate en una niña de 12 ó 13 años. Al menos no es algo que recomendaría a mi hija.
0 comentarios:
Publicar un comentario